Los cables de alimentación resistentes al fuego tienen una clase funcional E30, que corresponde a 30 minutos de suministro o control de energía en condiciones de incendio. Están destinados a alimentar cargas en edificios e instalaciones con mayores requisitos de protección contra incendios debido a la concentración de personas, bienes inmuebles y culturales de alto valor (rascacielos, hospitales, centros comerciales, túneles, museos, cines, teatros). Los cables se pueden utilizar para alimentar y controlar receptores (iluminación, ascensores, dispositivos de protección contra incendios, bombas). Están destinados a un uso permanente en el interior de edificios. En el caso de aplicaciones en exteriores, los cables deben protegerse contra la radiación ultravioleta y factores externos. Los cables eléctricamente funcionales E30 deben instalarse en sistemas de soporte adecuados y probados según DIN 4102-12.